Que no te pillen desprevenido
Cuando llega el momento de recibir la visita del técnico que evaluará tu local para otorgar la licencia de actividad, no hay espacio para improvisaciones. Esta inspección no es un trámite más: es la diferencia entre poder abrir legalmente tu negocio o tener que esperar —o peor, modificarlo todo desde cero. Preparar bien el local no solo evita sustos, también demuestra profesionalismo. Este artículo te guía paso a paso para dejarlo todo listo antes de que ese técnico cruce la puerta.
Antes de que toquen el timbre
La clave está en entender que el técnico no viene a fastidiarte, viene a comprobar que todo lo que declaraste en la solicitud coincide con la realidad y, sobre todo, que tu espacio cumple con las condiciones mínimas de seguridad, higiene y accesibilidad. Si tu licencia fue gestionada por un técnico competente, ya deberías tener planos y memorias que se ajustan a la normativa. Aun así, si lo que se construyó no coincide con lo proyectado, ahí empiezan los problemas. Por eso, el primer paso es revisar cada rincón con esos planos en mano.
Extintor a la vista y en condiciones
Uno de los puntos más básicos —y donde más fallan los emprendedores— es el tema de los extintores. No basta con tener uno colgado en la pared: debe estar homologado, tener la carga en regla, con retimbrado actualizado y perfectamente accesible. Si lo tienes detrás de un mueble, sin señalización, o con la fecha vencida, prepárate para una no conformidad inmediata. El técnico lo revisará, y no le bastará con ver que “está ahí”. Debe cumplir todos los requisitos de seguridad. Es un detalle mínimo, pero marca la diferencia.
No basta con un extintor, ¿tienes los necesarios?
Dependiendo del tamaño del local y el tipo de actividad, puede que necesites más de un extintor. Incluso puede que debas instalar modelos específicos, como los de CO₂ en cocinas o eléctricos. Los técnicos están entrenados para detectar carencias, y si tu local tiene más de 100 metros cuadrados, la normativa exige cierta distribución por superficie. Además, no olvides que los extintores deben ir acompañados de su señalización homologada. No vale imprimir un cartel y pegarlo con celo. Todo debe estar tal como lo exige la normativa de protección contra incendios.
Lo que realmente revisan con la licencia de actividad
Cuando hablamos de licencia de actividad, no solo nos referimos a un papel colgado en la pared. Es el documento que autoriza a tu negocio a operar en ese local concreto. El técnico no solo verifica si tienes esa licencia, sino si el local cumple con todo lo que declaraste para obtenerla. Desde el aforo permitido hasta los niveles de ruido, desde la instalación eléctrica hasta las salidas de emergencia. Si dijiste que tendrías una cocina industrial, esa cocina debe estar ahí, con su campana extractora y su sistema de extinción. Si declaraste un uso comercial sin atención al público, pero ahora tienes una barra para clientes, tendrás problemas.
No subestimes los pequeños detalles
A menudo, los técnicos se fijan en detalles que para ti pueden parecer menores, pero que para la normativa son clave. Por ejemplo, ¿las puertas de emergencia abren hacia fuera? ¿Están libres de obstáculos? ¿Tienes la señalización de evacuación instalada correctamente, con pictogramas visibles incluso con la luz apagada? ¿La instalación eléctrica tiene los certificados en regla? Un error común es asumir que si el electricista lo dejó “bonito”, ya está aprobado. Pero si no hay boletín, no hay seguridad jurídica.
¿Y si has hecho obras que no comunicaste?
Esto puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza. Si hiciste modificaciones después de solicitar la licencia, como ampliar una zona, mover tabiques o cambiar el uso de un espacio, eso puede invalidar todo el trámite. El técnico evaluará lo que hay frente a lo que figura en el expediente. Si hay diferencias, se paraliza la concesión hasta que presentes un proyecto modificado. Y eso implica más tiempo y más dinero. Por eso, antes de recibir la visita, asegúrate de que todo está tal cual lo declaraste. Si hiciste cambios, consulta con tu técnico antes de que vengan a inspeccionar.
Ejemplo real: una panadería que casi no abre
Hace poco, una pequeña panadería en Madrid estuvo a punto de no abrir por no tener ventilación cruzada en su obrador. Todo el proyecto estaba perfecto, pero al final decidieron cambiar la distribución para dejar el horno cerca del escaparate. El problema es que eso bloqueaba la corriente de aire. El técnico lo detectó al instante. Tuvieron que contratar un reformista, hacer un nuevo plano y reabrir el expediente. Resultado: dos meses de retraso y casi mil euros extra. Moraleja: lo que no esté aprobado, no se cambia sin informar.
Documentación lista y accesible
Aunque parezca obvio, muchos emprendedores no tienen a mano los documentos necesarios cuando llega el técnico. Y eso genera mala impresión. Deberías tener en una carpeta (física o digital): la memoria técnica del local, los certificados de instalaciones (eléctrica, climatización, PCI), el contrato de mantenimiento de equipos de seguridad, y por supuesto, el resguardo de presentación de la solicitud de licencia. Si el técnico hace preguntas, poder responder con papeles te ahorra problemas. No te confíes en la frase “eso lo lleva mi gestor”.
Un repaso final antes de abrir la puerta
Un día antes de la visita, haz un recorrido completo. Verifica que no hay cables sueltos, bombillas fundidas, puertas que no cierran bien, extintores vencidos o señales caídas. Prueba que los baños funcionan, que los accesos están libres y que no hay trastos fuera de lugar. Piensa que el técnico no solo revisa, también percibe. Si ve un local limpio, ordenado, con todo en su sitio, su actitud cambia. No es cuestión de engañar, sino de transmitir seriedad y compromiso con la seguridad y la legalidad.
No te la juegues: asesórate bien
Si no estás seguro de cómo preparar el local, lo más recomendable es contratar a un técnico que haga una “pre-inspección”. Es un servicio profesional que vale cada euro, porque identifica problemas antes de que sea tarde. También puedes revisar otros artículos en nuestro blog, como el de retimbrar extintores, para asegurarte de que cumples con todos los requisitos. No todo se reduce a tener buena intención; hay que demostrar que estás preparado para operar sin poner en riesgo a nadie.
El futuro de tu negocio depende de este paso
Pasar la inspección de la licencia de actividad no debería ser una pesadilla. Es un proceso técnico, sí, pero si te preparas bien, será un trámite más en el camino de emprender. Piensa en esto como una inversión, no como un castigo. Estás construyendo un negocio sólido, legal, y listo para recibir a clientes con la tranquilidad de que todo está en regla. Hazlo bien desde el principio y evitarás sustos después.




