El Puerto y el Ayuntamiento de Alicante chocan otra vez por los horarios de un evento en el Muelle 12
En Alicante, la polémica entre dos grandes entidades locales —el Puerto y el Ayuntamiento— vuelve a saltar a la palestra pública, esta vez centrada en el horario de cierre de un festival celebrado en el emblemático Muelle 12. Un desencuentro que pone de relieve no solo la pugna administrativa, sino también la crítica importancia de cumplir rigurosamente con las licencias de actividad, las declaraciones responsables y las imprescindibles licencias de apertura para cualquier tipo de negocio o evento multitudinario.
El pasado fin de semana, el festival Reggaeton Millennial Fest fue el epicentro de esta nueva disputa. La Autoridad Portuaria denegó el 25 de julio la solicitud de los promotores para ampliar el horario de cierre hasta las 02:30 horas, una hora que excedía las 00:30 establecidas en el pliego de concesión. Sin embargo, el Ayuntamiento, con su Concejalía de Urbanismo al frente, otorgó el 1 de agosto una licencia de apertura que contemplaba esa extensión horaria solicitada, generando un evidente choque de competencias y visiones.
¿Por qué son tan importantes las licencias para eventos en espacios públicos?
Las licencias de apertura y demás autorizaciones no son un mero trámite burocrático; son la columna vertebral que garantiza la seguridad jurídica y física de ciudadanos, organizadores y entidades. Sin ellas, cualquier negocio o festival se expone a sanciones severas y a la suspensión inmediata de la actividad.
En el caso de eventos como el celebrado en el Muelle 12, las licencias aseguran que el espacio cumpla con los requisitos técnicos, de seguridad, accesibilidad, y control de ruidos, entre otros factores clave. Además, definen horarios que minimizan el impacto sobre la convivencia vecinal y la correcta gestión del espacio público.
La competencia entre administraciones, en este contexto, debe resolverse siempre atendiendo al respeto riguroso de las licencias y a la coordinación institucional. Por eso, la importancia de entender que las licencias de apertura no solo son un permiso sino un pacto con la legalidad y la responsabilidad social.
La cronología del conflicto: ¿Quién decide qué horario?
El Puerto defiende su posición alegando que el pliego de concesión del espacio público fue claro desde un principio: el cierre de cualquier actividad musical, espectáculo o hostelería debe producirse a las 00:30 horas. La autoridad portuaria sostiene que esta limitación es inamovible, pues fue establecida para garantizar la compatibilidad del espacio con otras actividades y evitar conflictos con la movilidad, especialmente en un área donde coinciden grandes flujos de visitantes y tráfico, como en la escala de cruceros con miles de viajeros.
Por su parte, el Ayuntamiento se justifica en la gestión directa de la licencia de apertura y la potestad municipal para otorgar excepciones que, en su opinión, atienden a circunstancias excepcionales y criterios sociales y económicos, como la promoción cultural y turística. Así, ha aprobado un horario extendido para un ciclo de conciertos que se prolongará hasta noviembre.
Las licencias: ¿quién tiene la última palabra?
Esta discrepancia no es solo un choque puntual, sino un reflejo de una problemática recurrente en la gestión urbanística y administrativa en Alicante. La Autoridad Portuaria ha reclamado formalmente al Ayuntamiento que se abstenga de otorgar nuevas licencias en suelo portuario sin la previa coordinación y acreditación administrativa, buscando evitar nuevos conflictos y garantizar que las actividades se ajusten a la normativa vigente.
El conflicto pone sobre la mesa una cuestión fundamental: la licencia de actividad otorgada por el Ayuntamiento debe estar siempre en sintonía con las condiciones específicas establecidas en la concesión portuaria, pues la ausencia de esta coordinación genera inseguridad jurídica y puede derivar en sanciones, paralizaciones y perjuicios económicos para organizadores y entidades públicas.
Para comprender mejor estas dinámicas y evitar problemas futuros, es imprescindible consultar recursos especializados, como este blog de licencias, donde se explican con detalle las claves para tramitar correctamente las licencias y las obligaciones legales que conllevan.
Implicaciones para futuros eventos y negocios en Alicante
Este enfrentamiento no solo afecta a un festival concreto, sino que pone en alerta a promotores, empresas y organismos implicados en la organización de eventos y la apertura de negocios en zonas reguladas. La normativa vigente obliga a obtener todas las licencias pertinentes antes de iniciar cualquier actividad, especialmente en espacios sensibles como el puerto, donde la seguridad, la movilidad y la convivencia son prioridades.
El respeto a la normativa y la colaboración entre administraciones son claves para garantizar que Alicante pueda seguir acogiendo eventos de calidad sin generar conflictos ni poner en riesgo la imagen de la ciudad. La experiencia del Muelle 12 debe servir de lección para enfatizar la necesidad de planificar y tramitar con rigor cada paso, desde la solicitud inicial hasta la ejecución del evento.
Licencias, coordinación y respeto mutuo para evitar futuros choques
El reciente choque entre el Puerto y el Ayuntamiento de Alicante es un claro recordatorio de la complejidad que implica gestionar espacios públicos multifuncionales y eventos multitudinarios. La clave para evitar estas fricciones radica en la coordinación institucional y en la estricta observancia de las licencias de apertura y demás permisos que regulan la actividad.
Las licencias de actividad no solo garantizan el cumplimiento legal, sino que protegen a todos los implicados: desde el público asistente hasta los organizadores y las propias administraciones. Sin este marco, cualquier evento, por muy cultural o turístico que sea, corre el riesgo de verse truncado por discrepancias administrativas y sanciones.
Por tanto, la conclusión es clara: es imprescindible que los promotores y las entidades públicas trabajen con transparencia, respeto y rigor, para que Alicante continúe siendo un referente en la organización de eventos y en la gestión urbanística moderna y eficiente.

